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Reformar las contrataciones públicas durante una crisis: De qué manera los equipos de Lift marcan el rumbo

Antes de que la pandemia de coronavirus exigiera los sistemas de contrataciones hasta sus límites, muchos especialistas en la materia ya creían que la contratación pública necesitaba profundos cambio desde hacía tiempo. La pugna caótica que se produjo en los últimos meses para conseguir equipos de protección efectivos para los trabajadores de la salud y pruebas de detección para los pacientes ha dejado de manifiesto frente a todos nosotros algo que esos especialistas ya sabían: que la contratación pública necesita una reforma urgente.

En octubre de 2019, comenzamos a trabajar con cinco equipos de especialistas en contrataciones a través de Lift, nuestro programa de aceleración de impactos, con el objetivo de mejorar radicalmente determinados bienes, obras y servicios o de ampliar las oportunidades económicas. Cada uno de los equipos tiene la meta de abordar cuestiones críticas en sus propios sistemas de contrataciones, como mejorar las oportunidades para empresas más pequeñas, reducir el precio de los medicamentos, ofrecer servicios públicos innovadores y mejorar la coordinación interna dentro del Gobierno. Los avances que lograron con respecto a estas metas y las nuevas habilidades que adquirieron han demostrado ser invaluables durante la crisis que estamos atravesando. Muchos de esos equipos han aplicado las pautas de la contratación abierta para mejorar las adquisiciones relacionadas con la COVID-19 mediante el uso de datos abiertos, una mejor coordinación, monitoreo cívico y una gestión de proyectos veloz y flexible para responder a desafíos complejos que nunca antes habían atravesado sus comunidades. 

Aquí les mostramos los avances de los equipos de Lift en Buenos Aires, Ecuador, Ciudad de México, Moldavia y Nueva Orleans y de qué manera han respondido a la COVID-19 (haga clic en cada lugar para saltar a las novedades).

Creación en 60 días de una campaña para el monitoreo de la COVID-19 en Moldavia

Constantin Cearanovski es un gran conocedor de condiciones de salud letales. Es de Moldavia, país que tiene algunas de las tasas más altas de VIH y tuberculosis de Europa. Como miembro de la junta de Positive Initiative (Iniciativa Positiva), la organización más importante de promoción de los derechos y defensa de los pacientes en Moldavia, creía ya haber visto todo. Y entonces, se desató la pandemia de COVID-19 en todo el mundo.

“Reaccionamos de inmediato para reunir a las organizaciones de la sociedad civil y al Gobierno. Sabíamos que una respuesta rápida y coordinada sería esencial para evitar la propagación de la enfermedad y para aprovechar al máximo nuestros limitados recursos”, explica Constantin.

Gracias a la acción veloz de Positive Initiative, ahora una comunidad de treinta organizaciones —incluidos ministerios de Gobierno— se reúne periódicamente para buscar juntos soluciones.

Cuando Positive Initiative se unió al programa Lift en 2019, su objetivo era mejorar el acceso de los ciudadanos moldavos a la atención de la salud reduciendo los precios de los medicamentos contra el VIH y la tuberculosis. El equipo ahora se ha adaptado para responder a la crisis del coronavirus, y considera que eso ha sido posible gracias al trabajo realizado con Open Contracting Partnership (OCP) y Lift en los últimos seis meses, que los ha preparado para conseguir resultados positivos. En pocas semanas lograron crear una plataforma pública en la que se muestra información detallada sobre todos los contratos celebrados por el Gobierno para adquirir insumos y servicios destinados a combatir la COVID-19. Los tableros de mando de la plataforma, que son sencillos para el usuario, se diseñaron para ofrecer la información en tiempo real que sea más importante para los contribuyentes y proveedores, como comparaciones de precios, cuánto ha gastado cada establecimiento de salud, cuándo se entregan los artículos y qué empresas los proveen.

“Gracias a Lift, pudimos actuar más rápido. Ya contábamos con un equipo colaborativo y multidisciplinario que incluía a miembros de la sociedad civil y del Gobierno. También estábamos mucho más preparados para empezar a monitorear datos”, dice Constantin.

Esta tarea de monitorear contratos relacionados con la COVID-19 se basa en las iniciativas que el equipo había llevado adelante para promover el acceso a medicamentos asequibles durante la primera etapa del programa Lift. A través de Lift, el equipo consiguió el apoyo del Ministerio de Salud y de otras autoridades del ámbito sanitario, que respaldaron públicamente algunas de las principales recomendaciones formuladas por la organización de la sociedad civil y firmaron acuerdos de cooperación para mejorar juntos la atención de la salud. Además, identificó de qué maneras el Gobierno podría ahorrar dinero, al determinar qué medicamentos de marca que se compraban en ese momento podían reemplazarse por genéricos más económicos. También consiguió fondos para comenzar a desarrollar un sistema de gestión de inventarios nacional, que será muy útil para mejorar la elaboración de presupuestos y la planificación en el sector de la salud.

Para el futuro, el equipo espera que a partir de su labor de monitoreo de las contrataciones referidas a la COVID-19 se obtenga información que resulte útil para las autoridades responsables de la toma de decisiones durante esta compleja crisis. También está previsto que capaciten a representantes de la sociedad civil —que cumplen una importante función de vigilancia para garantizar la rendición de cuentas— y que sigan abocados a cumplir sus otros objetivos: reducir los precios de los medicamentos para la primavera de 2021, crear un sistema de gestión de inventarios centralizado, desarrollar proyectos de leyes para mejorar las políticas sobre adquisiciones y cubrir vacíos existentes, y avanzar en sus investigaciones sobre el reemplazo de los medicamentos de marca por genéricos. 

Datos en directo y rápida coordinación para una planificación más eficaz en Buenos Aires

Los escándalos de corrupción en las adquisiciones de emergencia que comenzaron a surgir en Buenos Aires en medio de la propagación del virus generaron gran indignación en el público. Sin embargo, el equipo de Lift del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires vio una oportunidad de actuar. Antes de la pandemia, el grupo había estado trabajando para cumplir la meta de utilizar la contratación abierta para ampliar las oportunidades económicas de pequeñas y medianas empresas (pymes). Tras los escándalos de corrupción, el equipo aprovechó su red y los conocimientos obtenidos a partir de su trabajo con Lift para promover una mayor transparencia en los contratos de emergencia. Debido a su trabajo en el área de la contratación abierta, el equipo también pudo ofrecer a sus colegas soluciones concretas.    

“Dimos un giro y logramos que los departamentos aceptaran la propuesta para garantizar que todos los contratos de emergencia relacionados con la COVID-19 se actualicen semanalmente, y esos contratos pronto estarán disponibles en formato del OCDS”, explica Juan Martín Vila, director de Gobierno Abierto del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, haciendo referencia al Estándar de Datos para las Contrataciones Abiertas (Open Contracting Data Standard, OCDS) para la divulgación de datos de contrataciones públicas. “Esto ha mejorado la transparencia y está creando un nuevo canal para alentar a las empresas locales a participar en las contrataciones públicas de emergencia”.

La labor que llevó adelante la ciudad con Lift y con OCP ha contribuido a orientar su estrategia ante la emergencia. Con las recomendaciones sobre políticas de contratación de emergencia formuladas por OCP, el equipo expuso ante los principales líderes, incluido el Ministerio de Economía, argumentos de peso a favor de una contratación más abierta. 

“A raíz de esta crisis, todos comprenden por qué es necesario, desde el punto de vista comercial, contar con mejores datos abiertos de OCDS y llevar a cabo una reforma sistémica de las contrataciones en nuestra ciudad”, expresó Juan Martín Villa.

Ahora, todos los procesos de contratación de emergencia se han centralizado, la información sobre contratos de emergencia es abierta y se actualiza con regularidad, y la ciudad ha establecido estrategias legales en materia anticorrupción, por ejemplo, formularios firmados de divulgación de conflictos de intereses. El equipo también está trabajando en la definición de un método para detectar conflictos de intereses agregando un tablero de mando sobre datos analíticos públicos para los contratos relacionados con la COVID-19 en el portal de contratación abierta, con una función de descarga de datos masivos. Está previsto que estos componentes comiencen a funcionar a mediados de mayo.

Mientras tanto, el equipo de Lift continúa avanzando con su objetivo central de generar más oportunidades para las pymes. Ha logrado su meta preliminar de que el proyecto tenga gran aceptación en el Gobierno de la Ciudad y ha establecido fuertes vínculos con departamentos clave. También ha identificado oportunidades para una colaboración más intensa con las pymes, analizando datos a partir de la situación actual de la ciudad. Antes de la pandemia, el equipo había avanzado en su estrategia de reducir los obstáculos que impiden el ingreso de las empresas más pequeñas, implementando programas de investigación y capacitación de usuarios destinados a pymes. Ahora, el equipo ha comenzado a realizar esa tarea a distancia y a través de Internet. La ciudad también está creando nuevos canales de comunicación para comprender sus necesidades durante la emergencia y el proceso de recuperación. Los proveedores pueden registrar si tienen disponibilidad para proporcionar materiales esenciales.

Si bien las perspectivas económicas son sombrías, la Ciudad de Buenos Aires tiene la esperanza de encontrarse en una posición que le permita brindar un mejor apoyo basado en los datos y revitalizar la economía local durante la recuperación.

Movilización de la vigilancia pública en Ecuador

El equipo de Lift en Ecuador es una coalición entre la sociedad civil y el Gobierno, cuya meta final es crear un ecosistema de contrataciones más abierto, transparente y receptivo. En el marco de esta iniciativa de reforma más amplia, el Servicio Nacional de Contratación Pública (SERCOP) tiene planeado actualizar su sistema de contratación electrónica con el OCDS. Las organizaciones de la sociedad civil estaban interesadas en crear un sistema cívico de monitoreo de la contratación pública, concentrado inicialmente en la adquisición de medicamentos. Nadie en el equipo podría haber previsto que una crisis de salud pública urgente se presentaría tan pronto.

La pandemia ha demostrado lo poderosa que podría ser esta reforma sistémica, basada en la colaboración entre el Gobierno y la sociedad civil. SERCOP creó una herramienta pública de búsqueda para monitorear las contrataciones de emergencia debido a la COVID-19 y detectar señales de corrupción, y proporcionó un canal para formular quejas. La sociedad civil identificó contratos con sobreprecios para la compra de insumos médicos esenciales, entre ellos, mascarillas N95 y bolsas para cadáveres, y generó presión del público para suspender los procesos y exigir que los actores pertinentes se hicieran responsables. Este tipo de circuito de retroalimentación es exactamente lo que el equipo tenía en mente cuando comenzó a trabajar a través de Lift.  

Si bien la crisis ha puesto de manifiesto el fuerte impacto que podría tener el proyecto del equipo de Lift, una reforma sistémica como la analizada representa un desafío y una iniciativa a largo plazo que exige una gran planificación. El equipo ha realizado un extraordinario avance para poder reaccionar a esta situación.

“El proceso de Lift ha ayudado a nuestro equipo, coliderado por representantes del Gobierno y de la sociedad civil, a armonizar ideas, definir el problema y ver las posibilidades y oportunidades”, expresó Wladimir Taco Lasso, Coordinador Técnico de Operaciones de SERCOP. “Hemos podido aplicar nuestra experiencia en este momento en que más resulta útil para facilitar la distribución de información entre los distintos actores, permitir una toma de decisiones ágil y favorecer que el público pueda vigilar la contratación pública de emergencia”.   

La creciente presión obligó a crear un nuevo portal de contratación abierta fácil de usar, con tableros de mando para el nivel nacional, los organismos y los proveedores. Apenas la semana pasada, el equipo lanzó su portal de datos de emergencia, que proporciona visualizaciones clave y datos abiertos para permitir el control social. Dentro de poco se proporcionarán datos más detallados, incluso a través de los OCDS.

“Esto representa un paso importante para nosotros y abre la puerta a la transparencia total en las contrataciones públicas”, dijo Wladimir. “También nos ayuda a adquirir más experiencia con los datos sobre contratación médica, y esto nos permitirá alcanzar mejor nuestras metas más amplias como equipo de Lift”.    

Si bien el equipo se ha concentrado en la COVID-19, ha obtenido valiosa información que orientará el desarrollo de una plataforma de monitoreo de mayor envergadura para las contrataciones en el sector de la salud. Asimismo, ha establecido el trabajo de base para mantener una colaboración más estrecha y un monitoreo más adecuado de los contratos públicos por parte de las organizaciones de la sociedad civil.

Planificación de una recuperación inclusiva en Nueva Orleans

La ciudad de Nueva Orleans es una de las comunidades más golpeadas por la pandemia de COVID-19 en los Estados Unidos. La población de la ciudad no solo ha experimentado uno de los peores resultados en salud del país, sino que las pequeñas tiendas locales han sido muy castigadas por la falta de turismo, que es lo que habitualmente impulsa la economía local. Esta crisis actual se suma, además, a un ciberataque que se produjo durante el invierno y que impidió al gobierno municipal funcionar con normalidad durante semanas.

“Los efectos de la COVID-19 van a dejar una marca en la historia de la ciudad. La forma en que respondamos a esta pandemia va a ser determinante”, comentó el alcalde Cantrell. “Queremos ayudar a nuestros comercios de la mejor manera posible”.

Aun con todo eso, el equipo de Lift de la ciudad de Nueva Orleans está llevando adelante su visión de lograr una comunidad más equitativa e inclusiva mediante el uso de la contratación abierta para que las pequeñas tiendas locales pertenecientes a minorías puedan tener más acceso a las oportunidades de contratación pública. Por ejemplo, la ciudad exige que las evaluaciones de las Solicitudes de propuestas se califiquen en una reunión abierta y pública. Para mantener la transparencia durante la pandemia, la ciudad ahora ha pasado a mantener esas reuniones públicas en línea.

La ciudad considera que esta tarea de reformar las contrataciones es una parte fundamental de sus iniciativas para la recuperación económica. El equipo de Lift, con gran apoyo del alcalde, ha sentado sólidos cimientos para lograr resultados positivos y ha conseguido una amplia aceptación de este proyecto por los distintos sectores del Ayuntamiento. Ahora, el Ayuntamiento, la Oficina de Diversidad de Proveedores, la Oficina de Contrataciones y la Oficina de Tecnología de la Información e Innovación trabajan en conjunto para poder realizar esta reforma sistémica. El equipo también está trabajando para que los contratos gubernamentales sean más accesibles para los pequeños proveedores. Para ello, escinde el rediseño de los contratos grandes y orienta su programa sobre Empresas Comerciales Desfavorecidas a proveedores no tradicionales de la ciudad.

Respuesta en la Ciudad de México para quienes normalmente se trasladan al trabajo en un mundo pos-COVID

Al entrar en vigor medidas de confinamiento y distanciamiento social, se produjo un cambio drástico en las necesidades de transporte y movilidad de la ciudad. El equipo de la Ciudad de México inició el programa Lift el año pasado con el objeto de renovar el contrato para el exitoso servicio de uso compartido de bicicletas de esa urbe, mediante un proceso abierto y competitivo. Aunque los procesos de la ciudad se ralentizaron y se produjo una pausa en las contrataciones no esenciales en medio de la pandemia, el equipo ha seguido adelante con sus esfuerzos para ampliar la cantidad y la distribución de bicicletas en toda la ciudad mediante un innovador proceso de contratación que garantiza las mejores condiciones del servicio público, una buena relación calidad-precio y la transparencia.

Aunque el proyecto no esté directamente vinculado con los aspectos médicos y económicos de la respuesta a la COVID-19, la labor que desarrolla el equipo de Lift es más que oportuna. El servicio ECOBICI, el programa de bicicletas compartidas más grande de América Latina, puede resultar incluso más beneficioso como alternativa saludable y ecológica al transporte público a medida que la ciudad se reabra.

El proyecto del equipo de Lift ha hecho hincapié en estrategias de contratación abierta que serán muy útiles a medida que la ciudad intente aprovechar al máximo los fondos limitados que existan tras la pandemia. Otros departamentos dentro del Ayuntamiento ya han recurrido al equipo para replicar sus prácticas de contratación abierta. 

Por ejemplo, luego de una estratégica campaña pública para anunciar la renovación del contrato a fines de 2019, el equipo de Lift recibió siete respuestas de nueve compañías a su emblemática Solicitud de Información. Esto ayudó a reunir información valiosa para comprender el mercado y las capacidades de los posibles proveedores. Al publicar las  conclusiones claves y agregadas de las respuestas de los proveedores, la Ciudad mostró de qué manera el proceso de consulta ayudaba a diseñar el nuevo modelo de servicio junto con el público y la comunidad de proveedores. La divulgación intencional de datos sobre variables claves ayudará a todos los proveedores a formular mejores propuestas y aumentará la confianza del público en el proceso.

“El valor de la contratación abierta va más allá de los aspectos meramente económicos. Tiene que ver, sobre todo, con el tipo de administración pública que deseamos y necesitamos”, remarcó Guillermo Ávila Resendiz, director de Regulación de Sistemas de Movilidad Urbana Sustentable de la Ciudad de México.    

Próximos pasos de los equipos de Lift En este momento difícil para todos nosotros, nos sentimos honrados al comprobar que los equipos pudieron responder con rapidez y eficacia a esta crisis. Gracias al trabajo de base realizado a través de Lift, confiamos en que podrán superar la crisis y lograr sus objetivos. Durante este período, la contratación abierta es más importante que nunca. Ansiamos ayudar a nuestros socios en un proceso de reconstrucción que, juntos, nos haga más fuertes, y en nuestros esfuerzos a favor de una reforma sistémica en la contratación pública.